-Antoine, Saint-Exupery-
Yo tenia amor propio, amor por la vida, por mi mundo, amor por mis sueños, por mis miedos, por mi vida, por mis recuerdos...
Pero un día, por razones que desconozco, pero que a menudo relaciono con el destino, levante la mirada y en una fracción de segundo partí ese amor en dos, sin saber como ni por que, simplemente lo regale. Añadiendo el amor por otra persona al lote.
Y ahora, me veo, de una forma muy diferente a la que corresponde a una repartición, no tengo la mitad de mi amor, tengo el triple. Recibo una cantidad desproporcionada en comparación con la que yo misma regale, hace bastante tiempo. ¿Lo mejor? que he descubierto que partir el amor en dos, en mi caso, fue la mejor de las decisiones, por que se que en lo que me resta de vida, no habrá cantidad para medir cuanto crecerá...
1 comentario:
Seguira creciendo asta el ultimo aliento de mi vida...
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